EA planea volverse privada bajo influencia árabe. ¿Qué implicaciones trae esto?

El día de hoy, el mundo de los videojuegos ha sentido un sismo de relevancia tras conocerse que EA (Electronic Arts) planea venderse a un holding de firmas privadas con una notoria influencia árabe. El acuerdo sería por 50.000 millones de dólares y permitiría a la empresa saldar su actual deuda, la cual se estima en unos 20.000 millones de dólares. Sin embargo, esto ha desatado preocupaciones, pues afectaría muchos juegos AAA, además de un posible cambio de rumbo y visión a lo que nos tenía acostumbrados EA. ¿Por qué la comunidad gamer debería estar atenta a la posible nueva versión de EA como empresa privada? ¡Indaguemos más sobre ello 🧐!

EA podría convertirse en una empresa privada con notoria influencia árabe. ¿Deben preocuparse los gamers?

Llenar el agujero de los 20.000 millones de dólares podría sacrificar muchas cosas en una EA privada

A diferencia de la actual EA pública, la cual sigue las expectativas de Wall Street de cumplir un calendario de ganancias trimestrales, al pasar a un modelo privado, la rentabilidad se puede planificar a largo plazo, lo que implica cambios en la estructura de incentivos. Esto significa que al establecerse una planificación de largo plazo, los nuevos dueños pueden «darse el lujo» de optimizar ingresos y egresos sin andar «de correderas» por cumplir las expectativas cortoplacistas de accionistas.

Pero, ¿qué podría sacrificarse con este cambio de rumbo? Pues bien, al haber un enorme hueco de 20.000 millones de dólares en deudas, los nuevos dueños pueden «redimensionar» a su antojo, las áreas menos rentables o con mayores dificultades de la compañía. Esto no solo significa despidos, sino también la venta o cierres de estudios o divisiones, así como parte de la propiedad intelectual de EA.

Muchos analistas coinciden en que la nueva EA privada apostará fuertemente por elementos como paquetes de suscripción, juegos predecibles con ingresos recurrentes como son los títulos de deportes y de eSports, servicios en vivo y juegos de tipo Ultimate Team. «Una EA privada tendría la oportunidad de hacer apuestas más estratégicas a largo plazo que no implique dar frutos de inmediato. Esto significa que la compañía daría un mayor enfoque a los servicios en vivo, a las franquicias deportivas anuales y las microtransacciones. La gran pregunta es si la nueva dirección tomará ese rumbo o continuará con el actual enfoque cortoplacista.» Señaló el analista de F-Squared, Michael Futter.

¿Cuáles franquicias o divisiones correrían más riesgo?

En los últimos años, varias franquicias bajo la sombrilla de EA han tenido muchos problemas en sus lanzamientos, lo que, obviamente, sería el blanco a atacar por parte de una nueva directiva en una EA privada. Entre los estudios que estarían en serios problemas están BioWare (Mass Effect, Dragon Age…), Codemaster (F1, Dirt…) e inclusive Respawn (Apex Legends, Star Wars Jedi…). No obstante, BioWare es el estudio con mayores problemas y muchos analistas dudan siquiera de que alguien se atreva a lanzarle un salvavidas si la nueva EA decide venderla. Esto, lógicamente, implicaría cerrar sus puertas de manera definitiva.

La otra preocupación de la posible nueva EA privada: la influencia árabe

No solamente el cierre de estudios y el nuevo enfoque que tendría esta nueva versión de la compañía han generado preocupación, pues también está la notoria influencia árabe, lo que podría incidir en un nuevo alineamiento de los juegos. Si bien los saudíes ya poseen el 10% de EA, al involucrarse en la compra de la compañía, aumentarían su influencia, lo que podría abrir «una caja de pandora».

Es importante reseñar que el régimen saudí se caracteriza por tener una postura antiliberal en temas sociales, y si logran tener una representación significativa en la nueva junta directiva de EA, podrían cambiar y afectar el argumento y temática de muchos títulos. Los Sims sería uno de estos títulos, pues este juego se caracteriza por ser muy liberal. No obstante, varios analistas creen que los saudíes no se involucrarán en los contenidos, sino que darán más prioridad a los juegos populares de Medio Oriente como son los de deportes y los eSports.

También, una notoria influencia árabe en la dirección de EA atraería la atención del gobierno de los EE. UU, sobre todo en lo que respecta a la privacidad de datos. Esto podría generar un escrutinio intensivo del gobierno estadounidense en el posible acuerdo, lo cual afectaría tanto los inicios como la evolución de una EA privada.

Como vemos, el panorama luce incierto para una nueva EA privada, así como para la actual EA pública, que enfrenta una enorme deuda que debe saldar pronto.

Vía: ArsTechnica