Un breve paseo técnico por el próximo explorador de archivos para Windows 11
Con el reciente lanzamiento de la Build 25309 para Windows 11 Insider Preview, Microsoft puso a andar públicamente su nuevo explorador de archivos. Si bien en apariencia hasta ahora es idéntico al actual explorer de Windows 11 estable, «bajo el capó» es donde se cocinan los grandes cambios. La transición hacia el nuevo SDK de Windows App (WinAppSDK) y la integración con la nueva biblioteca de interfaz de usuario (WinUI 3) son los dos protagonistas principales de esta nueva historia. Acompáñame a continuación en este breve paseo técnico que realicé sobre este próximo explorador de archivos.
Fuertes ventarrones de cambios se aproximan al tradicional explorador de archivos en Windows 11
Con Windows 11, Microsoft quiere dar un nuevo comienzo a su sistema operativo insigne. Primero fue el retiro del soporte oficial a las CPU anteriores a la octava generación (2018) y ahora van por un componente clave del sistema operativo: el explorador de archivos. Esta característica del escritorio Windows ha estado presente por décadas y hasta la llegada de la versión 1903 de Windows 10, utilizaba DirectUI como biblioteca gráfica para las interfaces de usuario. Recordemos que esta biblioteca emplea la antigua API Direct2D para representar la UI. Esto explica el por qué no había cambios trascendentales en el explorador de archivos en las diferentes ediciones / versiones de Windows.
A partir de Windows 10 1903, el explorador de archivos comenzó a usar la biblioteca gráfica WinUI 2 lo cual permitió a Microsoft avanzar en la implementación de Fluent Desing. Pero no fue sino con Windows 11 cuando el explorador de archivos utiliza completamente WinUI 2 y tras la implementación de los controles gráficos proporcionados por XAML Islands, este componente del sistema puede brindar nuevos menús contextuales y barras de herramientas más modernos.
Sin embargo, WinUI 2 y XAML Island arrastran varios problemas heredados de UWP, siendo el principal de ellos el de que con cada versión nueva hay que readaptar todas las interfaces de componentes y Aplicaciones. Esto, obviamente, resulta ser un auténtico dolor de cabeza para los desarrolladores. Con la transición hacia WinUI 3 y WinAppSDK, Microsoft no solo pretende hacer cambios cosméticos, sino también cambios muy profundos en el explorador de archivos a fin de ponerlo en forma para el futuro. Otro de los problemas que achaca a XAML Island es que sus componentes son más lentos que los usados en la tradicional Api Win32.
Uno de estos cambios es eliminar las limitaciones heredadas de UWP, dejando solo sus beneficios como el poder ejecutarse en diferentes plataformas. Es importante reseñar que WinAppSDK hasta los momentos solo funciona en plataformas Windows y Microsoft quiere que trabaje con Xbox, HoloLens y otras plataformas compatibles con UWP. Un punto a destacar aquí es que WinAppSDK es el sucesor natural de UWP.
Otro de estos cambios es que los desarrolladores ya no tendrán que readaptar su código para versiones previas de Windows. De hecho, Windows App SDK funciona de manera coherente en Windows 11 y Windows 10 a partir de la versión 1809. Además, con cada actualización de características en Windows 10 y Windows 11, se entregan nuevas versiones de WinAppSDK.
No se trata de un explorador de archivos reescrito completamente
Hay que aclarar un detalle muy relevante, este cambio a WinUI 3 / WinAppSDK no se trata de un explorador de archivos completamente reescrito ni de remplazar algún tipo de Apps como .NET o Win32. Este movimiento se trata más de implementar una especie de nueva biblioteca con la cual no solo se mejoraría la compatibilidad de API tradicionales con los nuevos componentes del sistema, sino que además, permitiría que el explorador de archivos pueda acceder a las nuevas características de WinUI 3. Con ello se podría implementar una gran renovación de diseño en un futuro.
Obviamente, durante la transición de WinUI 2 / XAML a WinUI 3 / WinAppSDK es muy probable que se rompa el modelo de extensibilidad del explorador de archivos. Así, servicios como Google Drive y DropBox serían las víctimas más comunes, a no ser que Microsoft haya conseguido una forma de subsanar estas situaciones.
Solo resta esperar las nuevas compilaciones de Windows 11 Insider y monitorear los cambios que vayan apareciendo en el nuevo explorador de archivos. Veremos si esta transición llega a buen puerto o si resulta ser un auténtico quebradero de cabeza.